El veto a la Ley de Univesidades fue un descuido

NO FUE UN VETO A LA LEY, FUE UN DESCUIDO.-
Recientemente el Presidente de la Republica anuncio, en un acto de
aparente manifestación de reconocimiento a la crítica, que procedía a
vetar la reforma de la Ley de Universidades, la cual había sido
aprobada por iniciativa propia en la apresurada carrera de la Asamblea
Oficialista, una carrera legislativa no vista en la historia. La Ley
en cuestión fue aprobada aproximadamente a las 03 de la mañana del día
24 de Diciembre. "Hoy a las tres de la mañana aprobamos una tremenda
ley de educación universitaria" que es la culminación de una "lucha
histórica" por lograr un "cambio profundo en la universidad" para
abrirla a todo el pueblo, dijo el diputado oficialista Alberto
Castelar, a la televisión estatal VTV.
Tales declaraciones significan que el oficialismo estaba claro en lo
que estaban aprobando, y que lo estaban haciendo violentamente antes
de que se constituyera la nueva asamblea, es decir, no hay ninguna
duda en cuanto al fin político que se perseguía, consecuencialmente
son inaceptables los arrepentimientos posteriores. Hago esta acotación
debido al hecho que Chaves sale diciendo que veta la Ley por cuanto ha
reconocido que existen errores, de inmediato aparecen los altos
estudiosos de la Asamblea, en una de sus características
manifestaciones de “independencia intelectual, de capacidad de estudio
y análisis”, a decir, estamos conformes con el veto del Presidente y
reconocemos los errores cometidos. No señores, ese veto no fue
producto de un análisis de reconocimiento de errores, no fue un
reconocimiento al poder de protesta de los estudiantes, de los
docentes universitarios, sino, que simplemente, a Chávez, en ese mundo
de confusión que vive y en un exceso de confianza, se le fue la bola y
no conto el tiempo de lapso legal para la promulgación de la Ley, que
es de diez días, consecuencialmente, conforme a la Constitución
Nacional, quedo fuera de tiempo legal la promulgación y tenía que
enviarla nuevamente al congreso, previa reunión en el Consejo de
Ministros, o inventar la estratagema del VETO A LA LEY. Chávez se
enredo en su propia confianza de que lo tiene todo a su favor, la
crisis interna que está viviendo, dentro de su gobierno, dentro de su
partido y la pérdida de credibilidad internacional lo tiene
desesperado y se descuido con esta Ley, y no tuvo otra alternativa que
en su característica falsedad y engañosa forma de hacer política,
presentarse ante el país como reconociendo errores. Señores, el 26 de
Septiembre le jugó una mala pasada a Chávez, le quito la mayoría
parlamentaria y por eso se vio obligada a vetar la Ley. La nueva
Asamblea Nacional le gano una batalla. Vean lo que dice la
Constitución Nacional en su artículo 214.- “El Presidente de la
Republica…promulgara la ley dentro de los diez días siguientes a aquel
en que la haya recibido. Dentro de ese lapso podrá,  con acuerdo del
Consejo de Ministros, solicitar a la Asamblea Nacional, mediante
exposición razonada, que modifique alguna de las disposiciones de la
ley o levante la sanción a toda o parte de la misma”. La Asamblea
Nacional decidirá acerca de los aspectos planteados por el
Presidente…, por mayoría absoluta de los diputados…presentes y le
remitirá la ley para la promulgación…El Presidente de la
Republica…debe proceder a promulgar la ley dentro de los cincos días
siguientes a su recibo, sin poder formular nuevas observaciones”.
Primero: Tenia plazo hasta el tres de Enero y no lo hizo.  Segundo: No
podía enviarla a la Asamblea, ya que le es necesario el acuerdo del
Consejo de Ministro con exposición detallada sobre las modificaciones.
Como van a motivar la negación de lo que conforma la base
inconstitucional de lo que querían aprobar? Como van a negar la
autonomía universitaria, no podía hacerlo y consecuencialmente, al no
tener motivos y al existir un parlamento distinto, que le iba a
discutir la Ley, porque ahora ya no es la cantidad de robots levanta
manos, sino, hombres con principios y que demostraron el pasado 5 de
Enero, que las cosas cambiaron y que ahora si hay quien hable y
discuta, no solo el silencio de los reverentes levanta manos, que si
vio obligado, con toda la rabia que haya tenido por dentro, a dejar
sin efecto la ley anti- autonomía que quería.
Pero hay mas, las leyes que la Asamblea haya calificado de orgánicas,
deben ser remitidas antes de su promulgación, a la Sala Constitucional
del Tribunal Supremo de Justicia. Nos preguntamos cuantas leyes
orgánicas fueron aprobadas en la maratónica carrera legislativa en la
pasada Asamblea?  y cuales fueron enviadas la Sala Constitucional.?
Sobre esto continuaremos escribiendo.